Ausencias y una presencia

Mucho se habló antes del partido de la ausencia de Gary McGhee y cómo podría afectar al Leyma en el partido contra el Breogán, por el temor que causaba en la afición coruñesa el potencial de Larsen. Pero lo cierto es que más que la ausencia de McGhee, pesaron otras “ausencias” que hubo ayer en el equipo herculino. Porque “ausentes” estuvieron varios jugadores, que aparecieron físicamente en la cancha pero no parecían ellos. Desconocidos estuvieron Dago, Taiwo (es cierto que venía de lesión), Javi Vega, Gaizka, Matulionis o Belemene. Demasiados jugadores “out” para poder llevarse un partido contra Breogán (vuelvo a decir que para mí, el gran favorito de la competición).

El buen partido de Raffington, sin duda el mejor jugador de Leyma ayer, contuvo a Larsen en unos números asumibles. Fueron los hermanos Quintela y los tiros desde las esquinas de Breo los que nos hicieron daño en ataque. Belemene sufrió mucho con el pequeño de los Quintela, quien desbordaba a Romaric cada vez que lo encaraba (vaya dos canastones de Sergi en los finales de 2Cy 3C).

Pero el problema de Leyma estuvo principalmente en su ataque. Espeso, jugando a tirones, desacertado en grado sumo. La defensa cerrada y dura de Breo (como la que nos hizo Valladolid) nos colapsó la zona y forzó a que una y otra vez tirásemos desde fuera. En el 1C el Leyma llevaba 4 tiros intentados de 2 y 9 triples (con 2 anotados de Peci, que ya sabemos que no es algo habitual). Es verdad que la tendencia del juego actual es tirar mucho de tres, pero ya hemos visto que este equipo ha funcionado mejor cuando ha tenido un mayor equilibrio. Ese juego se fue equilibrando en el 2C y 3C, gracias principalmente a Zach que movía mejor el balón y a un Jakstas que tuvo más presencia ofensiva de la habitual. El Leyma se consiguió poner arriba en el marcador, pero un final de 3C en el que la 4ª falta de Zach y el cansancio de Peci les llevaron al banco, propició un despegue de Breo de 8 puntos que se hacían muy cuesta arriba en un partido tan trabado como el de ayer

El último cuarto fue el cúmulo del desacierto por ambos equipos, las defensas, el cansancio por la dureza del partido y la presión atenazó a ambos equipos que se reflejó en el pírrico 9-9 del cuarto. Los últimos 5 minutos de juego con un 1-2 a favor de Breo todo en TL, mostró lo que fue el partido del Leyma en ataque. Tiros y más tiros de 3 (4 seguidos en un mismo ataque con 6 abajo) que no encontraban aro, pese a que algunos eran tiros liberados.

Es difícil ganar un partido con 6/29 T3 y 10/20 en TL. Me da la impresión de que nos pudo la ansiedad y que jugamos un poco al ritmo que marcó Breogán, que sin duda fue mejor ayer.

Hablaba en el título de ausencias y de UNA PRESENCIA. Y esa es la gran noticia del partido de ayer, por encima de la derrota. Y es que es una alegría que un jugador vuelva a disfrutar de verse en una cancha tras 18 meses de lesión. Poder ver a Zyle disfrutando de jugar un partido de competición oficial tras su larga convalecencia por la rotura del tendón rotuliano es algo que nos ha puesto a todos una sonrisa en la boca. Se lo merece porque ha trabajado como un animal para poder volver a un cancha. Ojalá que pronto la lesión sea sólo un recuerdo.

Pablo Alonso (@pablopas_)