Un equipo en alza

Acaba la primera vuelta de esta apasionante competición que es la LEB Oro y los aficionados al baloncesto de A Coruña hemos recuperado la sonrisa y, lo que es mejor, la esperanza.

Tras un par de meses aciagos en los que hemos encadenados hasta nueve derrotas consecutivas, la ilusión está de nuevo entre nosotros.

Es verdad que alguna de ellas era previsible (Betis, Bilbao,…) pero dejando al margen a estos dos gigantes ninguna otra plantilla LEB Oro ha demostrado ser claramente superior a la nuestra. De los dieciocho conjuntos que componen la división la nuestra puede estar a lo sumo entre las cuatro o cinco primeras, incluyendo en ellas a los antes citados vascos y andaluces.

La plaga de lesiones de esos meses (Monaghan, Carlos Martinez, Braxton Ogbueze…), unida a la ya conocida de Larry Abia, dejó muy tocada a la plantilla, que por momentos parecía un juguete roto, falta de alguna pieza que hiciera encajar el resto. La contratación temporal de Andrés Miso vino a dar algo de solidez a un conjunto endeble, pero aun no era suficiente. No fue hasta la llegada de Jeff Xavier (lo que acabó de centrar a un Sergi Pino un tanto sobrepasado en esas fechas): las piezas finalmente encajaron y comenzamos a hilar buen juego.

La recuperación de los lesionados Monaghan, Carlos y Braxton y la prevista de Larry puede provocar un “camarote de los hermanos Marx” en algunas posiciones, lo que puede poner en algún aprieto a Gus Aranzana. 

De momento la gestión de la plantilla ha comenzado con la cesión de Axel Louissant a Clavijo de LEB Plata en busca de minutos y de la necesaria progresión. De entrada al suizo no le ha ido mal, pues si en Coruña promediaba 10’ de juego por partido ha debutado en su nuevo equipo con 18’. Por si acaso, conservamos los derechos de Axel para, al menos, una temporada más.

Así pues, la felicidad reina entre nosotros y para celebrarlo, el viernes pasado en el partido con Araberri, la directiva decidió obsequiarnos con invitaciones para que pudiéramos llevar amigos y conocidos a disfrutar del baloncesto. La iniciativa fue todo un éxito y más de mil “no habituales” se acercaron a Riazor para ser testigos de una nueva victoria del equipo, que por momentos arrolló a los visitantes. Ahora sólo falta que estos no habituales se aficionen y logremos, ¡por fin!, acercarnos a la cifra mágica de los tres mil aficionados precisos para asentarnos en los puestos con premio de la clasificación. 

Julián Valiente - viendo baloncesto en Coruña desde 1967

Mi primer contacto con el baloncesto fue en 1967, cuando el Bosco ascendió a Primera División Nacional. Fui socio del Bosco desde 1971, he sido abonado y apoyado todos los proyectos que se llevaron a cabo en Coruña: Basketmar, CAB y ahora Basquet Coruña. Paralelamente he sido árbitro de categoría nacional y ahora, lo que son las cosas, ocasionalmente escribo de baloncesto por afición.