J5- Derrota contra Bilbao Basket 64-74

Foto cortesía de Basquet Coruña

Nueva derrota ayer en el Palacio ante uno de los aspirantes al ascenso, Bilbao Basket.

Partido muy diferente al que nos había acostumbrado el Leyma. Ya en las previas, Aranzana había avisado que debido a la falta de rotaciones debería bajar el ritmo de juego para poder llegar con aire al final del partido. Y en efecto así fue. Jugamos con un par de velocidades menos y Bilbao, con dos bases veteranos a los que también les va ese ritmo, no hizo nada por cambiar de velocidad. Eso nos llevó a un partido lento, parado por momentos y no muy atractivo.

A la corta rotación (9 jugadores) habría que restar a un Miso todavía fuera de forma. Además ayer no "aparecieron" por el parqué algunos jugadores como Quinton (desaparecido, descentrado, ausente…) o un Araujo que empezó muy mal y sólo al final de partido encontró el camino del aro.

El equipo estuvo bien en defensa, cortó la sangría de otros partidos y controló bien el juego interior de Bilbao (frenó muy bien a Larsen que había sido hasta la fecha uno de los sustentos ofensivos de Bilbao). Sin embargo, en ataque nos costó mover la bola para encontrar tiros liberados, poca fluidez, mucho bote, además tampoco corrimos para anotar en transición canastas fáciles. Sólo un Braxton, que demuestra que cada vez va a más, vio aro con facilidad. Si a eso unimos las muchísimas pérdidas de balón, muchas de ellas tontas en pases imposibles, o malas decisiones en forma de tiros que no se deben tomar por parte de ciertos jugadores o en ciertos momentos, nos encontraremos con las claves de la derrota.

Es una lástima que un equipo que estaba ya armado al final de pretemporada, con una identidad de juego clara, se haya venido abajo por la plaga de lesiones, en especial del motor de este equipo que es Zach. Pero tengamos calma, el año pasado empezamos mal y después forzamos un 5º partido en Manresa, y el año que llegamos a semifinales contra Melilla empezamos 1-7.

Lo único que nos preocupa de este inicio es que la presión pueda afectar a jugadores tan jóvenes como los nuestros. Por eso, creemos que acciones como la de ayer al final de partido del Tsunami y Malandros, dejándose la garganta y los brazos aporreando percusiones para animar a los jugadores, son fundamentales. Bravo por ellos!. Ayer comenzaron a anotar la primera canasta para la siguiente victoria.